1. TODO A LA LIGA
El Villarreal querrá quitarse ante el Barça las dos penas que contrajo esta semana: resultó apeado del tren de la Champions y cayó eliminado en la Copa frente al Racing de Santander. Sólo le queda seguir en el buen camino del campeonato liguero enfocando hacia algo inédito en su historia: ganar los próximos partidos (tiene aplazado un encuentro frente al Levante) para proclamarse campeón de invierno. ¿Hazaña o sueño?
Último esfuerzo del año para definir si el submarino peleará por las primeras plazas y si el lÃder sigue en vuelo. Los de Marcelino suelen defender en formato 4-4-2 con Luiz Junior en porterÃa y delanteros disfrazados de centrocampistas, Buchanan y Moleiro.
Por dentro, Parejo maneja el juego con su clarividencia y Comesaña presiona a todo lo que se mueva en su perÃmetro sin obviar su impetuosa llegada a las áreas.
El pase final, interno lo pide Ayoze mientras el georgiano Mikautadze es más de hacer la individual. Equipo rÃtmico y vertical con muchos regateadores (casi todos partiendo desde la banda derecha) para precaución o preocupación de Balde y el central colindante blaugrana.
2. CON TANTO FUTBOLERO, LA PRESIÓN, CLAVE
Se juega un partido pero con dos batallas siempre deportivas, el fútbol con pelota y la defensa sin balón. En esta última residirá la ventaja del posible ganador. En ganar la presión para forzar errores o, al menos, hacer ‘la vida incómoda’ a los adversarios. El Barça de Hansi Flick ha vuelto a su nivel con la vuelta de Pedri y Raphinha. Es más, hasta el estado fÃsico del equipo parece superior gracias al excelente fútbol del tinerfeño y las mil carreras, de desmarque o presión, del brasileño. Dos no hacen once pero saben hacerte correr mejor y, por ende, más ordenados. Ahora bien, hoy no estará Pedri. Baja sensible.
3. PROYECTOS RESPALDADOS
Me gustan los clubes con presidentes que no ceden a la presión mediática (o de la afición) cuando deciden poner el ‘ojo’ y la contratación en un entrenador.
Sin ir más lejos, Marcelino estaba construyendo un buen Valencia, Campeón de Copa, pero tuvo que irse del histórico club porque ‘metÃan cuchara’ en alguna de sus decisiones. Lo fichó el Villarreal y mirad cómo camina el Valencia y cuánto control ostenta el técnico asturiano en el plantel de Fernando Roig.
En Can Barça, Hansi Flick sigue asentando sus ideas (con variantes muy interesantes últimamente) y ofreciendo oportunidades a jóvenes de La Masia en su segunda temporada. Bien y bravo, respectivamente, para el entrenador alemán porque cuanto más se sienta valorado, más futuro azulgrana deseará.
Regresando al hoy, el Villarreal no es tan fuerte defendiendo como creando y atacando. Ergo, será importante cargar el área de compañeros que quieran finiquitar la faena de Lamine, Balde o Raphinha si logran asentar su juego cerca del área de Luiz Junior. El guardameta brasileño volverá a la titularidad pero necesitará parar o despejar situado en el área de meta; saliendo ofrece menor rendimiento.
Fútbol de autor en La Cerámica. Veremos de qué color pintará la fiesta final.

