La Real Sociedad ha encadenado una racha de cinco partidos sin perder que llega en un momento clave de la temporada y que devuelve tranquilidad, impulso y confianza al proyecto. Antes de desgranar sus números, conviene destacar un dato muy revelador: han pasado 580 dÃas -83 semanas, 19 meses- desde el final de la última racha similar del equipo, en abril de 2024. Casi dos años sin una secuencia prolongada de resultados positivos como la actual. Ahora, con Sergio Francisco al mando, la Real ha vuelto a encontrar una lÃnea sólida: 1-1 ante el Celta, 2-1 al Sevilla, 3-2 al Athletic, 1-1 en Elche y 1-3 en El Sadar. Tres victorias y dos empates que confirman el crecimiento del equipo y el salto competitivo tras un inicio repleto de dudas.
Oyarzabal celebra la victoriaÂ
JESÚS DIGES / EFE
Esta trayectoria llega, además, después de varios intentos recientes que se quedaron a las puertas. El más claro fue en septiembre y octubre de 2024, cuando la Real también encadenó cuatro jornadas sin perder -0-0 en Valladolid, 3-0 al Valencia, 1-1 contra el Atlético y 0-1 en Girona-, pero precisamente Osasuna frenó aquella dinámica ganando 0-2 en Anoeta en el quinto encuentro. Fue un corte brusco que impidió que el equipo encontrara esa quinta victoria y su continuidad entonces.Â
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La comparación más llamativa, sin embargo, es con marzo–abril de 2024, el último momento en el que la Real logró una racha calcada: 3 victorias y 2 empates. Aquel tramo incluyó el 2-3 en Granada, el 2-0 al Cádiz, 0-1 ante el Alavés , 2-2 contra el AlmerÃa y 1-1 en Getafe el 21 de abril de 2024. Ese duelo en el Coliseum fue el final de aquella secuencia. Curiosamente, esta racha parte de la última vez que la Real Sociedad habÃa remontado un partido. Un dato del que se ha hablado mucho esta semana.
Graanda-Real SociedadÂ
Pepe Torres / EFE
Esa coincidencia temporal subraya el nuevo punto de inflexión. Como entonces, la Real ha vuelto a engancharse, a competir con energÃa y a sumar con regularidad. Pero esta vez el contexto es distinto: el equipo venÃa muy tocado lejos de casa, con dificultades ofensivas y sin continuidad en su fútbol. La victoria en Pamplona y esta racha de cinco partidos sin perder consolidan un crecimiento que se habÃa insinuado, pero que ahora toma forma con resultados, madurez y una identidad más clara.