Corría la séptima jornada de la temporada 2019 de la F1. La escudería Mercedes, con Lewis Hamilton y Valtteri Bottas, llegaba con total confianza al Circuito Gilles Villeneuve, tras haberse sentado en lo más alto del podio en cada una de las seis primeras fechas del calendario (cuatro victorias del británico y dos del finlandés).Vettel y Hamilton, en el podio de Canadá 2019.F1A pesar de que su mejor resultado había sido una segunda posición en Mónaco, Sebastian Vettel y Ferrari lucían en buena forma para poner fin a su comienzo sin victorias. El tetracampeón del mundo se quedó con la pole, al registrar el tiempo más rápido de la ‘qualifying’, dos décimas más rápido que el ’44’ de la parrilla. El ‘controvertido’ giro de guionDe esta manera, el piloto teutón dominó lideró gran parte de la carrera sobre el entonces cinco veces campeón del mundo. El competidor de Mercedes lo seguía muy de cerca, pero no encontraba el ese ritmo adicional necesario para adelantar al Ferrari en pista. Sin embargo, a 22 vueltas del final, Vettel cometió un error en la tercera curva del trazado de Montreal. El número ‘5’ se pasó de frenada, teniendo que cortar por el césped para volver a pista en el cuarto giro. En dicho escenario, el teutón llevó a Hamilton muy cerca del muro, obligándolo a desacelerar y así mantener la primera posición de la parrilla. Nueve vueltas después, los comisarios dieron el veredicto final sobre el encuentro entre los líderes de la carrera. Cinco segundos de penalización para el piloto de la ‘Scuderia’ por volver a entrar al circuito de manera peligrosa. Asimismo, debido a que Lewis se mantuvo al margen, el británico sumó su quinta victoria de siete posibles en el arranque de la temporada. La explosión de Sebastian VettelVettel no tardó en emitir su opinión al respecto. El cuatro veces campeón del mundo indicó que «nos están robando la carrera», al enterarse de la penalización. «Hay que ser un ciego absoluto para pensar que puedes atravesar la hierba y luego controlar el coche», continuó Vettel en la radio. «Tuve suerte de no haberme estrellado contra la pared. Esto no es justo. Estoy enfadado… y tengo derecho a estar enfadado. No me importa lo que diga la gente». Hay que ser un ciego para pensar que puedes atravesar la hierba y luego controlar el cocheSebastian VettelEl enojo del alemán continúo tras finalizada la carrera. De esta manera, el ‘5’ protagonizó uno de los momentos más recordados de los últimos años. El ex piloto de Red Bull cogió el letrero marcado con el número 1, colocado originalmente donde estaba el coche de Hamilton, y lo cambió con el número dos, plaza en la que estaba su Ferrari. Deportivamente, Vettel salió en defensa de su rival: «La gente no debería abuchear a Lewis. Creo que él vio lo que pasaba, no creo que hubiera intención de perjudicarle. Tuve problemas para mantenerme en la pista. La gente no debería abuchear a Lewis, si acaso deberían abuchear estas decisiones graciosas», finalizó.
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