La Real Sociedad no termina de encontrar una manera asequible, sencilla y viable de competir y acercarse a las victorias de manera recurrente. Su derrota en Vitoria supone un duro varapalo por el resultado y la manera de perder, pero también un aviso repetido de que ese no es el camino y necesita uno más corto. No es sostenible vivir de la épica, las remontadas y de que el alma consiga puntos en los instantes finales. La Real de Imanol se construyó siendo los mejores en los primeros compases del partido para luego gestionar. Y esta Real de Sergio no solo no es la mejor sino que, como se vio en Mendizorrotza, es el peor equipo de toda LaLiga en los primeros 45 minutos. TendrÃa únicamente diez puntos si contasen las primeras mitades, habiendo marcado cinco y encajado la friolera de 13 y marchándose por delante al descanso en una única ocasión (vs Sevilla), y siete por detrás. Ni ser el séptimo mejor en las segundas (24 puntos) sirve para compensarlo.
Brais Mendez of Real Sociedad reacts during the LaLiga EA Sports match between Deportivo Alaves and Real SociedadÂ
Juan Manuel Serrano Arce / Getty
Marcar primero
Y es que los txuri urdin se quitaron en El Sadar el trauma de no saber remontar en demasiado tiempo y lo hicieron con una gran actuación, eficaz, pero eso no significa que vaya a darle la vuelta a los marcadores cada semana como si el rival no se sintiera habitualmente mejor cuando va ganando. Está bien saber hacerlo pero no puede ser un discurso, sino un recurso puntual. El Alavés estuvo cómodo con el 1-0 pese a que la Real se volcara al ataque. La Real de Sergio estaba viviendo, más allá de una mejora evidente en las últimas semanas en su juego y en su efectividad y competitividad, de lograr puntos sobre la bocina, y eso no es sostenible. Un punto en Vigo, dos extra en el derbi, uno más en Elche y casi otro ante el Villarreal, además de uno más contra el Espanyol tras ir perdiendo 0-2.
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Los datos asustan pero es que los txuri urdin únicamente han estado por delante en lo que va de Liga, que ya son 15 jornadas, 185 minutos, más descuentos. Y es grave porque, salvo contra el Barça, cuando la Real estuvo por delante en algún momento del partido, ganó el partido (Mallorca, Athletic, Sevilla, Osasuna). Pero claro, ese botÃn es muy escaso. Y lo que es peor, la Real ha comenzado en 11 partidos de 15 por detrás en el marcador, a remolque, obligando a Sergio a agitar el árbol y el plan. 489 minutos por detrás, más de un tercio del total de minutos jugados. Sólo ante el Mallorca, el Sevilla y el Athletic no estuvo perdiendo la Real. GravÃsimo. Y de ahà los 16 puntos de 45 actuales que dejan a los realistas a 11 puntos del Espanyol, por ejemplo, incluso siendo una evidencia que la Real venÃa creciendo.
Sin tranquilidad
No se han dado victorias tranquilas. Incluso ante Mallorca y Sevilla en casa se sufrió porque el marcador era mÃnimo y la tendencia a fallar, alta. Los motivos de todo esto son muchos desde la mala suerte a perdonar en ataque, pero el perpetrar errores graves de valor gol casi en cada partido tiene mucho que ver, incluso en encuentros donde el equipo defendió bien en general. Lastran demasiado.
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La Real y el propio Sergio necesitan dejar de estar en alerta, en la obligación de atacar con prisas y de dar vueltas al marcador. De destacar el alma para llegar vivos hasta el final y más la gestión para evitar el error. Necesita un plan y sobre todo un refuerzo positivo en forma de gol tempranero en el marcador e ir por delante. Mucho más teniendo en cuenta que sus dos capitanes están fuera y que otro jugador que iba a ser capital no está ni se le espera de momento. Además de rendimientos individuales muy pobres y decepcionantes, o tremendamente intermitentes, de piezas muy importantes. Es el caso de Kubo, Brais, Aramburu o Remiro, siendo diferentes los casos de los cuatro.
El viernes vuelve a tener un partido clave para que la situación no se enquiste de nuevo. Llega un rival con más tendencia aún al error grosero propio y que está en descenso, como el Girona. Es un dÃa para adelantarse y gestionar a partir de ese primer gol. Y que sirva para lo siguiente.

