El Chelsea-Barça se empezó a perder en la rueda de prensa del lunes. El tema, tanto para Flick como para Raphinha, eran las dos recaÃdas que tuvo el brasileño de su rotura de fibras del bÃceps femoral. El jugador tenÃa que estar tres semanas de bajas y ha estado dos meses fuera.
Raphinha estuvo generoso autoinculpándose, pero la verdad se leyó entre lÃneas en las palabras de Flick. “Todos nos equivocamosâ€� dijo para salvar a un staff médico y un cuerpo de recuperadores que no está pasando un buen año. La pubalgia de Lamine Yamal o ese Balde que, antes o después de la lesión, no ha terminado un solo partido, son dos sÃntomas del descontento de la plantilla con la preparación fÃsica. Hasta el punto que muchos de ellos se la trabajan por su cuenta fuera del Club.
Luego llega el PSG o el Chelsea, y los rivales vuelan como aviones a propulsión y el Barça viaja con la avioneta del Tibidabo. El propio Flick lo dijo claro tras el varapalo de Stamford Bridge: “Ellos han sido más fÃsicos y dinámicosâ€� o, también, “necesitamos ser más agresivosâ€�. E hizo una promesa: “veremos un Barça diferenteâ€�. ¿Eso indica que se va a dar por vencido con la defensa adelantada? El problema de jugar siempre igual, sin ninguna variación desde hace 18 meses, es que el Rayo, el Brujas o el Chelsea ya todos saben cómo atacarte. Cuanto mejores son los futbolistas, más te dañan. ¿Variará algo Flick? ¿Entrenarán más para no encajar tantos goles iguales? ¿O vamos a seguir leyendo cómo profesionales del futbol desde Thierry Henry hasta Alan Shearer siguen contando que la defensa del Barça es un chollo para los delanteros? Lo de la “loca trampa del fuera de juegoâ€� y “los cuatro tontitosâ€� de Shearer de ayer fue altamente ofensivo. Pero debe invitar a Flick a recapacitar.

