«El 90% de los empleados no quería el fichaje de Hamilton»

Arturo Merzario (Como, Italia, 1943), es famoso por ser el piloto que sacó a Niki Lauda de su coche en llamas en la trágica carrera en el viejo Nürburgring de 1976, algo que salvó la vida al entonces piloto de Ferrari, que se quemó las manos al extraer al austriaco del monoplaza.El italiano, de 82 años ha hablado sobre el fichaje de Lewis Hamilton por Ferrari, algo que tacha como una mera «operación comercial». Merzario pilotó para Ferrari y sigue teniendo relación con empleados de la Scuderia y habla con conocimiento de causa.»En mi opinión, la llegada de Hamilton a Maranello fue una operación comercial. Según lo que sé, el 90% de los empleados no aprobaron esta decisión y luego, cuando el piloto no se siente valorado o parte integral del grupo, pierde motivación. ¿Para qué volverte loco para ganar tres décimas cuando no vas a salir de la tercera línea?», ha comentado Merzario en una entrevista concedida a ‘La Gazzetta dello Sport’.Pese a todo, cree que aún está a tiempo de mejorar su rendimiento poco a poco. «Esto no ha acabado. Está esperando la oportunidad adecuada. Sólo va a arriesgar cuando sea necesario, no por la octava posición. También porque si quisiera irse, encontraría otro equipo. Hamilton ha demostrado su valía ya, no está en la situación de Charles, él tiene que demostrar que es un campeón», dice sobre la diferencia entre el siete veces campeón del mundo y Leclerc, con cero títulos, aunque con el SF-25n esté siempre 0,3 segundos en todas y cada una de las sesiones de la mayoría de circuitos.Sobre las sonoras palabras de Hungría, la de «soy un inútil y Ferrari debería cambiar de piloto», cree que no fueron en serio. «Aquellas declaraciones de Lewis fueron un poco irónicas para mí, pero por supuesto, esa posición no es aceptable para un siete veces campeón del mundo. Me parece que Lewis se siente como alguien que ha sido destrozado por Ferrari», dice sobre una actitud que no es de recibo. Los rumores de ambiente enrarecido y las dudas sobre la adaptación a Ferrari ya salían desde gente muy cercana al equipo ya en los test de pretemporada. La sencillez de Sainz cambió por una atención desmesurada y una prespectivas irrealesm con una figura como Hamilton y eso no gustaba a alguno de los empleados desde el principio. Eso sí, nada que no pueda cambiar inmediatamente con un buen resultado de pronto.