Autor: Vishwajit Sawant
En una impresionante remontada, el São Paulo FC demostró su resurgimiento en forma y determinación con una convincente victoria sobre su eterno rival, el Palmeiras, que le aseguró el pase a las semifinales de la Copa do Brasil. Los tricolores hicieron gala de una habilidad y una estrategia impresionantes, disipando las dudas que les asaltaban hace apenas unos meses. Con victorias consecutivas, tanto en casa como fuera, el São Paulo ha demostrado que aún puede soñar a lo grande y luchar por los grandes títulos.
El regreso de los máximos goleadores del equipo, Luciano y Calleri, dio a los aficionados paulistas una inyección de moral muy necesaria. Sin embargo, surgieron dudas en el centro del campo debido a la ausencia de Pablo Maia, que se enfrentaba a una tragedia personal tras el reciente fallecimiento de su padre. Para resolver este problema, el seleccionador Dorival Júnior decidió alinear a Alisson junto a Gabriel Neves como dúo improvisado en el mediocampo, con Rodrigo Néstor y Wellington Rato también formando parte de esta formación táctica.
Los primeros minutos del partido fueron de fuerte presencia del Palmeiras, con una presión incesante sobre la defensa paulista. Sin embargo, la defensa tricolor se mantuvo firme, convirtiéndose en uno de los momentos más destacados del partido. El equilibrio se rompió cuando Piquerez marcó un gol totalmente involuntario. En el minuto 34, Rafael, guardameta del São Paulo, fue sorprendido y no tuvo tiempo de reaccionar. Hasta ese momento, el partido seguía igualado.
Contrariamente a lo esperado, el São Paulo no se desanimó tras el gol del Palmeiras. En cambio, fue el rival quien pareció desvanecerse. Al comienzo de la segunda parte, en cuestión de minutos, Caio volvió a poner en ventaja al São Paulo. Su notable gol, que más tarde describió como «de corte», hizo gala de su habilidad y lo señaló como uno de los más destacados de la temporada.
Sin embargo, el partido no estuvo exento de polémica. A medida que subía la temperatura, Calleri (61′), que había pasado apuros durante todo el partido, logró colarse e intentó un cabezazo que encontró el fondo de la red. Para desgracia del São Paulo, el gol fue anulado por el árbitro, que consideró que había habido falta por un supuesto empujón entre Diego Costa y Zé Rafael. La decisión fue muy discutible y, en su momento, totalmente subjetiva. Al abandonar el campo, Dorival Júnior y los jugadores expresaron abiertamente su indignación, haciéndose eco de los sentimientos del cuerpo técnico. Aun así, el São Paulo no dejó que el contratiempo afectara a su rendimiento.
Manteniendo su dominio, el São Paulo demostró una excelente organización táctica, neutralizando eficazmente las amenazas del Palmeiras sobre su portería. En los minutos finales, David selló la victoria para el Tricolor – 1-2. Ese gol decisivo, cortesía de un pase de Juan, la estrella emergente de Cotia, y de un error de Luan, consolidó aún más el control del São Paulo sobre el partido. Al resistir los implacables intentos del Palmeiras hasta el pitido final, el São Paulo logró una hazaña increíble: clasificarse para la siguiente ronda de la Copa do Brasil por segundo año consecutivo, eliminando a su acérrimo rival y haciéndolo en el mismísimo estadio que pertenece al club alviverde.
Aquella contundente victoria contra el Palmeiras en la Copa do Brasil ejemplificó el potencial y la capacidad del equipo paulista. Reavivó la confianza de los jugadores, el cuerpo técnico y los fieles seguidores, infundiendo la esperanza de alcanzar logros importantes y la posibilidad de ganar un título sin precedentes. Tras superar un período difícil a principios de año, caracterizado por una mala campaña y una eliminación prematura del Campeonato Paulista, el resultado del jueves ofrece al São Paulo la oportunidad de consolidar su resurgimiento y buscar la grandeza en las próximas fases del torneo.
En semifinales, el São Paulo se enfrentará al vencedor del doble duelo Corinthians-AméricaMG. En el primer partido, el Corinthians perdió 0-1 fuera de casa, pese a ser considerado favorito incondicional.
La otra pareja de semifinales fue la formada por «Gremio» y «Flamengo RJ». El 26 de julio juegan en el «Arena do Grêmio» y el 16 de agosto disputan el partido de vuelta en el «Maracanã».
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