Autor : Monojit Mandal
Los Warriors avanzaron a las semifinales de la Conferencia Oeste cuando Stephen Curry anotó 50 puntos en el séptimo partido contra los Sacramento Kings. El excelente esfuerzo de Curry le llevó a establecer el récord de la NBA de más puntos anotados en un séptimo partido, superando la marca anterior de 48 puntos que ostentaba su antiguo compañero de equipo, Kevin Durant.
Los Warriors tuvieron un comienzo difícil en la serie, perdiendo los dos primeros partidos, pero se recuperaron con tres victorias consecutivas. Sin embargo, la derrota en casa preparó el terreno para una contienda decisiva en Sacramento, donde Curry protagonizó una actuación decisiva.
Curry demostró sus increíbles habilidades con el balón al encestar 20 de 38 tiros, incluidos siete triples, para ayudar a los Warriors a defender su título. El compañero de equipo de Curry y hermano de Splash, Klay Thompson, bautizó la competición como «el partido de Steph Curry».
Los Kings, que pusieron fin a una sequía de 16 años en la postemporada bajo la dirección del entrenador del año, Mike Brown, lucharon duro al principio, pero no pudieron frenar a Curry y a los tres jugadores principales de los Warriors. A pesar de los esfuerzos de De’Aaron Fox y Malik Monk, los Kings fueron finalmente derrotados por la potencia de fuego de los Warriors.
La victoria prepara una emocionante semifinal de la Conferencia Oeste entre los Warriors y Los Ángeles Lakers de LeBron James. Los dos equipos tienen un largo historial de enfrentamientos en las Finales de la NBA, que se remonta a la época de James en Cleveland.
Cuando sonó la bocina final, Steve Kerr (entrenador de los Warriors) abrazó a Brown (su antiguo ayudante), que ya había dirigido los asuntos de postemporada de los Warriors durante la prolongada ausencia por motivos de salud de Kerr, y acababa de liderar el notable cambio de rumbo de los Kings. El emotivo momento sirvió para recordar la amistad de los dos entrenadores y la influencia que ejercieron el uno en la carrera del otro.
En general, el partido será recordado como una de las mejores actuaciones individuales de un jugador en un séptimo partido, y los aficionados de los Warriors esperan que Curry pueda mantener su buena forma en la siguiente ronda de los playoffs.