Autor: Vishwajit Sawant
El Inter de Milán se clasificó para la final de la Copa de Italia tras imponerse por un reñido 1-0 a su rival, el Juventus, en el partido de vuelta de semifinales. En el partido de ida, que terminó con empate a 1-1, el gol de Federico Dimarco en la primera parte marcó la diferencia, y el equipo de Simone Inzaghi se impuso por 2-1 en el global de la eliminatoria.
Los locales tuvieron un comienzo brillante, con un inteligente pase de Nicolo Barella que encontró a Dimarco, quien batió tranquilamente al guardameta del Juventus para adelantar al Inter en el minuto 15. El gol animó a los locales, que tuvieron más el balón durante el resto del periodo.
El Juventus, que jugaba sin un delantero reconocido y con Federico Chiesa en la posición de falso nueve, tuvo dificultades para crear ocasiones claras, y el defensa Mattia De Sciglio cabeceó a gol su mejor oportunidad antes del descanso. Los visitantes mejoraron en la segunda parte, pero la defensa del Inter se mantuvo firme para asegurar la victoria.
En la final, el Inter se enfrentará al ganador de Fiorentina y Cremonese. En la ida, el Fiorentina se impuso por 2-0 fuera de casa. La final se celebrará el 24 de mayo en el Estadio Olímpico de Roma. El Inter intenta revalidar su título tras ganar la competición la temporada pasada al imponerse al Juventus por 4-2 en la final.
El entrenador del Inter, Inzaghi, tomó la sorprendente decisión de dejar a Romelu Lukaku en el banquillo, a pesar de que al delantero belga se le anuló su polémica sanción en el partido de ida. Edin Dzeko se asoció con Lautaro Martínez en ataque, pero fue Dimarco quien marcó el gol decisivo para el equipo.