Autor: Barkha Roy
El delantero del Fluminense Germán Cano sufrió una sequía goleadora cuando su equipo cayó derrotado por 2-0 ante el Botafogo en el emblemático estadio Maracaná, en el Campeonato Brasileño de Serie A, el pasado domingo. Tras esta decepcionante derrota, Cano admitió abiertamente las carencias de su equipo, haciendo especial hincapié en las dificultades de la primera parte del partido.
«En la primera parte, creo que dejamos demasiados espacios. Nuestro marcaje defensivo estuvo por debajo de la media. Pero eso no es motivo de alarma; tenemos que seguir trabajando duro«, dijo Cano en sus declaraciones posteriores al partido.
El Botafogo consiguió perforar la red en dos ocasiones, con goles en los minutos 19 y 22. En respuesta a estos primeros contratiempos, el entrenador del Fluminense, Fernando Diniz, realizó sustituciones tácticas con el objetivo de reforzar su defensa. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, el equipo fue incapaz de remontar el marcador desfavorable.
Notablemente, a pesar del resultado desfavorable, el partido estuvo marcado por fervientes celebraciones entre los hinchas del Fluminense. Incluso después del pitido final, los aficionados siguieron cantando y bailando en las gradas del Maracaná, disfrutando de la gloria de la reciente clasificación de su equipo para la final de la Libertadores. Ha sido el primer gran encuentro de la afición con el equipo desde la memorable victoria sobre el Internacional del pasado miércoles.
Germán Cano, el talentoso delantero argentino, agradeció sinceramente el apoyo incondicional de la afición y dio una idea de las aspiraciones del equipo de cara a la final de la Libertadores.
«Los aficionados acudieron en masa a apoyarnos, y su presencia fue inmensamente valiosa. Este apoyo es particularmente significativo, ya que hemos asegurado nuestro lugar en la final de la Libertadores y nuestra ambición es consolidarnos como la fuerza más importante del fútbol sudamericano».«dijo Cano apasionadamente.
El Fluminense no volverá a jugar hasta el 19 de octubre, cuando se enfrente al Corinthians. Sus ojos están puestos en la final de la Libertadores contra Boca Juniors, prevista para el 4 de noviembre.
La derrota ante el Botafogo dejó al descubierto algunas vulnerabilidades defensivas del Fluminense. La franca admisión por parte de Cano de los fallos defensivos del equipo en la primera parte sirve de advertencia para mejorar este aspecto crítico del juego. Apoyado por una afición apasionada e inquebrantable, el Fluminense busca recuperar el impulso mientras se prepara para el esperado choque final de la Libertadores contra Boca Juniors.