Autor: Barkha Roy
Max Verstappen demostró su dominio en la Fórmula 1 con una contundente victoria en el Gran Premio de Catar, una carrera marcada por una dramática salida en la que chocaron los pilotos de Mercedes Lewis Hamilton y George Russell.
La carrera comenzó con grandes expectativas, ya que Hamilton y Russell aspiraban a reforzar sus posiciones en el campeonato de constructores y en la carrera por el título de pilotos. Sin embargo, sus ambiciones se vieron truncadas cuando se enredó con Verstappen en la primera curva. Hamilton, equipado con neumáticos blandos para un mayor agarre, adelantó a Russell por el exterior, lo que provocó un contacto que hizo que Hamilton cayera a la grava.
Posteriormente, la frustración fue evidente en las comunicaciones por radio entre los pilotos, pero Hamilton asumió más tarde toda la responsabilidad por el incidente y pidió disculpas a su equipo y a Russell.
Ocon 💥 Hulkenberg 💥 Pérez
Saltaron chispas cuando tres pilotos se enfrentaron dramáticamente en #F1Sprint 😵#F1 #QatarGP pic.twitter.com/IBwZep45l6
– Fórmula 1 (@F1) 9 de octubre de 2023
A pesar de quedar rezagado al principio, Russell se recuperó notablemente y logró un impresionante cuarto puesto. Mercedes se dio cuenta rápidamente de que los tiempos de parada más cortos y el menor desgaste de los neumáticos en comparación con la carrera al sprint permitieron a Russell apretar más de lo previsto en un principio, lo que puso de manifiesto el potencial de ambos pilotos de Mercedes si se hubiera evitado la colisión.
Verstappen, que había ganado su tercer título el día anterior, salió desde la pole position y mantuvo el liderato durante toda la carrera. Abandonó brevemente el liderato tras su primera parada en boxes, exigida por la normativa sobre kilometraje de neumáticos promulgada por motivos de seguridad. Todos los equipos estaban limitados a un máximo de 18 vueltas con cada juego de neumáticos, una medida de precaución contra posibles fallos de los neumáticos a altas velocidades en los bordillos del circuito.
En medio de un aluvión de paradas en boxes para cumplir con los límites de kilometraje de los neumáticos, el dúo de McLaren formado por Oscar Piastri y Lando Norris aprovechó la oportunidad, asegurándose el segundo y tercer puesto respectivamente. Ambos pilotos mantuvieron sus posiciones en los compases finales de la carrera, aprovechando el caos que se produjo en la salida.
Aunque Alex Albon, de Williams, lideró la carrera durante un breve periodo tras la parada en boxes de Verstappen, las maniobras estratégicas acabaron favoreciendo a Charles Leclerc, de Ferrari, que fue quinto por detrás de Verstappen, Piastri, Norris y Russell. El ascenso de Leclerc se vio facilitado por un paso en falso de Fernando Alonso, de Aston Martin, que abandonó el circuito a mitad de carrera.
Alonso, que sufrió molestias en el asiento, se aseguró admirablemente la sexta plaza, seguido por Esteban Ocon, de Alpine, y Valtteri Bottas, de Alfa Romeo. Sergio Pérez, de Red Bull, que salió desde boxes debido a un accidente en la carrera de velocidad, terminó noveno, pero sufrió dos penalizaciones por exceder los límites de la pista y acabó en 10ª posición por detrás de Zhou Guanyu, de Alfa Romeo.
La carrera fue un arduo desafío para todos los pilotos, agravado por las paradas adicionales en boxes y las abrasadoras temperaturas del desierto, lo que la convirtió en una de las competiciones más exigentes a las que se han enfrentado nunca.
Finalmente, el cuarto puesto de Russell y el quinto de Leclerc aseguraron a Mercedes dos puntos cruciales en el campeonato de constructores. Este resultado fue aún más significativo debido a la ausencia de Carlos Sainz, cuyo Ferrari no pudo iniciar la carrera debido a una fuga de combustible detectada apenas una hora antes de la prueba.