Autor : Monojit Mandal
El Comisionado Adam Silver expresó su firme opinión sobre las demandas de intercambio y subrayó la importancia de una temporada completa de 82 partidos durante una reciente rueda de prensa tras la aceptación de las nuevas normas de descanso de la NBA. En respuesta a una pregunta de Howard Beck, de Bleacher Report, sobre las peticiones para traspasar a los jugadores clave Damian Lillard y James Harden, Silver dejó claro que no apoya tales peticiones.
Las peticiones de intercambio de estos dos jugadores All-Star dominaron los titulares durante todo el verano. Damian Lillard declaró inequívocamente que el único equipo para el que jugaría sería Miami Heat, mientras que James Harden acusó abiertamente de deshonesto al director general de Miami Heat, Daryl Morey.
La opinión de Silver sobre esta cuestión es sólida. Jugadores famosos que buscan cambios tras firmar contratos de larga duración ensombrecen la liga. Esto incentiva a estos jugadores a adquirir primero contratos valiosos y luego solicitar traspasos, en lugar de completar primero los compromisos contractuales y luego explorar la agencia libre.
Esta situación pone a los equipos en una situación difícil. Deben decidir si aceptan la solicitud de intercambio y se arriesgan a perder a un jugador importante o si se alejan del jugador y de los futuros agentes libres. Además, cuando las solicitudes de intercambio y las reclamaciones se hacen públicas, esto puede poner en peligro sus perspectivas de llegar a un acuerdo, ya que las partes interesadas pueden verse disuadidas por el drama asociado.
Además de ocuparse de las solicitudes de intercambio, el Comisario Silver hizo hincapié en la necesidad de aumentar la participación en los partidos y comentó la recientemente promulgada «Política de participación de los jugadores». «Tenemos que volver al principio de que ésta es una liga de 82 partidos», afirmó, subrayando su compromiso con toda la temporada.
Aunque el objetivo de la política es fomentar el juego limpio, su aplicación práctica puede causar dificultades. Los equipos pueden evaluar el riesgo de multas en relación con la seguridad de sus jugadores clave, o incluso pueden pensar en etiquetar las lesiones como «falsas» para eludir las restricciones.
Todavía se desconocen los resultados finales de la Política de Participación de Jugadores, así como los futuros destinos de James Harden y Damian Lillard para la temporada 2023-24. El mensaje del Comisionado Silver, por otra parte, es inequívoco: la naturaleza pública de las peticiones de canje, así como el aumento del descanso de los jugadores sanos, tienen ramificaciones negativas para el negocio de la NBA.