Autor : Soorya G
Rivaldo, un nombre que ha pasado a la historia del fútbol brasileño, ha recorrido los reinos del fútbol internacional, desde la fase de clasificación para el Mundial hasta la Copa América, los Juegos Olímpicos y dos torneos de la Copa Mundial. En una interesante entrevista, el legendario delantero recordó sus momentos vistiendo la ilustre camiseta canarinho, arrojando luz sobre un episodio en particular. Reveló una fascinante historia en la que el legendario seleccionador brasileño Mario Zagallo libró una especie de batalla con Romário para conseguir su inclusión en el equipo de los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996.
En su afán por reunir el equipo olímpico de sus sueños, el seleccionador se enfrentó al singular reto de seleccionar a tres jugadores mayores de 23 años. Rivaldo, Bebeto y Aldair fueron los elegidos para ocupar estos codiciados puestos. Rivaldo nos dijo con sinceridad: «Recuerdo perfectamente que el propio Zagallo me dijo: ‘Vamos, Rivaldo, me enfrenté a Romário por tu culpa. Era como si estuviera compartiendo esta información, aplicando un poco de presión«recordó el director de orquesta jubilado.
Para ampliar esta intrigante historia, continuó: «Me consideraban sin duda uno de los mejores jugadores de Brasil, así que mi inclusión se basó en el mérito. No tuve ninguna responsabilidad por la ausencia de Romário. Hubo momentos en los que Zagallo dijo: ‘Quiero que rindas excepcionalmente bien porque podría haber traído a Romário’.»
Reflexionando sobre el partido por el tercer puesto que culminó con la victoria de Brasil, Rivaldo compartió un sentimiento agridulce. «Experimenté una compleja mezcla de felicidad y melancolía. Mientras saboreaba la medalla de bronce, era plenamente consciente del deseo imperante de conseguir el oro olímpico. Brasil tiene actualmente dos medallas en esta categoría, pero en el pasado los jugadores han sido duramente criticados por no ganar el oro olímpico«observó astutamente.
A pesar de su relativa inexperiencia en el escenario mundialista, Rivaldo consiguió hacerse con un puesto de titular durante todo el torneo. Volvió a hablar de la importancia de consolidar la posición de uno a través del rendimiento sobre el terreno de juego, poniendo como ejemplo al ex jugador Giovanni.
Para concluir con una reflexión sobre la derrota de Brasil en la final contra Francia, Rivaldo recordó la plétora de teorías conspirativas que surgieron para explicar la derrota. Recordaba vívidamente las reacciones de desconcierto, incluso dentro de su propia familia.
El estimado ex delantero concluyó con rotundidad: «Nunca saldría al campo con la intención de perder. Si se produjera una situación así, me abstendría de salir al campo. En toda mi vida, nunca me he encontrado con una situación en la que alguien ofrezca incentivos para perder deliberadamente. Estoy muy lejos de tales prácticas, especialmente en el contexto de una Copa del Mundo.«