Autor : Soorya G
En un dramático giro de los acontecimientos, James Rodríguez se encontró el jueves en el centro de la eliminación del São Paulo de los cuartos de final de la Copa Sudamericana. Sin embargo, en medio de su decepción, fue abrazado rápidamente por sus compañeros de equipo. A pesar del apoyo tranquilizador, el maestro colombiano no tardó en asumir la responsabilidad de la derrota del São Paulo ante la LDU en el emblemático estadio Morumbí.
Comentó: «Creo que tuve un impacto positivo; di una asistencia, pero luego vino el desafortunado incidente del penalti. Nunca en mi vida me había encontrado con una situación así. Asumo toda la responsabilidad; es culpa mía. Podría haber rendido mejor, pero así es el fútbol, lleno de giros imprevisibles.«
James Rodríguez entró en el partido durante la segunda parte y aumentó considerablemente la capacidad ofensiva del São Paulo. Notablemente, fue su tiro de esquina el que derivó en el gol decisivo de Arboleda, asegurando el 1-0 para la Tricolor y forzando la tanda de penales, donde James fue el único en fallar. Llama la atención que en apenas un mes de llegada al club, James haya visto menos minutos sobre el terreno de juego en comparación con Lucas, un recién llegado que desde entonces se ha hecho con la titularidad, a pesar de lesionarse tras su llegada. Sin embargo, James desprende una personalidad tranquila y no se precipita a la hora de exigir más tiempo de juego.
Dijo: «Me siento en buena forma física, y es el entrenador quien determina el tiempo de juego. Llegué hace sólo 25 días, lo que es relativamente poco tiempo. Sin embargo, cada día hago lo que puedo. Hoy me he sentido bien, y mi forma física mejora progresivamente con cada partido.«
El São Paulo tiene ahora un apretado calendario para recuperarse del revés sufrido en Sudamérica. En el horizonte está el partido del Campeonato Brasileño contra el Coritiba, previsto para el domingo. Este choque representa una oportunidad crucial para salir de una desalentadora racha de seis partidos sin ganar.