Autor: Barkha Roy
Barbora Strycova y Hsieh Su-Wei, ex campeonas de Wimbledon, reservaron su plaza en la final femenina de dobles con una actuación dominante en semifinales. Se impusieron a Marie Bouzkova y Sara Sorribes Tormo por 6-4 y 6-1 y se enfrentaron en un emocionante duelo por el título. Esta victoria tiene un significado especial, ya que marca la última aparición de Strycova en Wimbledon antes de su retirada. El experimentado dúo tendrá ahora la oportunidad de competir por el campeonato de dobles el domingo.
En su camino se interponen las formidables cabezas de serie nº 3, Elise Mertens y Storm Hunter. Mertens y Hunter demostraron su fuerza durante todo el torneo, ganando con facilidad. En semifinales, se deshicieron rápidamente de Caroline Dolehide y Zhang Shuai por 6-1 y 6-1 en sólo 55 minutos. Su excepcional estado de forma y sus actuaciones dominantes les convierten en firmes aspirantes al título.
Hsieh no es ajena al éxito en Wimbledon, ya que en 2021 formó equipo con Mertens para conseguir la victoria en el prestigioso evento, además de ganar juntas el torneo de Indian Wells. Además, Mertens alcanzó la final de Wimbledon el año pasado junto a Zhang Shuai. Esta será su tercera aparición consecutiva en la final de Wimbledon, cada vez con una pareja diferente. Por su parte, Hunter debutará en una final de Grand Slam, lo que añade un elemento de emoción al partido.
El camino de Strycova hasta la final es especialmente notable teniendo en cuenta que regresó al tenis profesional tras un breve retiro en 2020. Este Wimbledon será su último torneo antes de retirarse de nuevo, lo que añade un toque de sentimiento a sus actuaciones. Por otro lado, Hsieh se tomó un descanso para recuperarse de las lesiones y recargarse, volviendo a la pista junto a Strycova a principios de año durante el torneo de Madrid. Su reencuentro resultó fructífero y demostraron su destreza en la cancha.
La próxima final marcará la primera aparición de Strycova y Hsieh juntas desde su victoria en el torneo de Roma en 2020. Hsieh triunfó recientemente en Roland Garros junto a Wang Xinyu. Ahora está a punto de lograr el raro «Channel Slam», ganando consecutivamente los títulos de Roland Garros y Wimbledon en una misma temporada. Aunque no fueron seleccionados en el concurso en curso, sus habilidades y su resistencia les hicieron llegar a la final.