Autor: Barkha Roy
Aston Martin se enfrentó a un momento de incertidumbre durante la carrera de Montreal, cuando Fernando Alonso mantuvo a Lewis Hamilton por el segundo puesto. El equipo dio instrucciones a Alonso para que empezara a levantar el pie y ralentizara la marcha sin dar explicaciones, lo que suscitó dudas entre las cadenas de televisión y los equipos rivales. Tras la carrera, el director del equipo Aston Martin, Mike Krack, aclaró la situación, revelando que la decisión estaba motivada por un presunto problema con el sistema de combustible. Sin embargo, resultó ser una falsa alarma.
«Pensamos que teníamos un problema con el sistema de combustible, pero no estábamos seguros, así que por precaución dijimos que era mejor ahorrar combustible y hacer lift and coast«, explicó Krack. Presionado para obtener más detalles, Krack se negó a revelar la naturaleza específica de la indicación errónea, afirmando que pensaban que tenían un problema que no se materializó.
Al aplicar la estrategia «lift and coast», Alonso sacrificó su tiempo por vuelta, pero se aseguró su sexto podio de la temporada. Krack admitió que era difícil evaluar el coste de su decisión, estimando que puede haber supuesto una pérdida de unas décimas de segundo. Sin embargo, Aston Martin dio prioridad a la conclusión segura de la carrera frente a la asunción de riesgos innecesarios.
Las vagas instrucciones dadas a Alonso, especuladas por el propio piloto como una forma de evitar una preocupación excesiva, desataron las especulaciones entre las emisoras y los equipos rivales sobre el problema subyacente. En un giro sorprendente, Mercedes informó a Hamilton durante la carrera de que Alonso podría tener problemas de frenos, lo que levantó ampollas en el pitwall del Aston Martin. Krack comentó con humor que estaban sorprendidos por los comentarios, sugiriendo que Mercedes parecía tener más conocimientos sobre su coche que ellos.
Al final, Alonso se aseguró el segundo puesto, con Hamilton completando el podio por detrás del ganador de la carrera, Max Verstappen. Hamilton reconoció que Aston Martin había estado un paso por delante de Mercedes durante todo el fin de semana, atribuyendo su ventaja a la nueva carrocería lateral y al revisado suelo del AMR23. Admitió que sus dificultades en las curvas de baja velocidad, especialmente con la tracción, contribuyeron a su incapacidad para igualar el ritmo de Alonso y Verstappen.
Hamilton se mostró optimista y expresó su confianza en la capacidad de Mercedes para mejorar la carga aerodinámica trasera y la eficiencia general. Considera que el rendimiento del equipo está mejorando gradualmente y que van en la buena dirección. Aunque Verstappen tenía una cómoda ventaja, Hamilton consideró que el ritmo del equipo estaba más cerca del de Aston Martin durante la carrera.