Autor: Vishwajit Sawant
Las dificultades del Vasco en el Campeonato Brasileño se han visto agravadas por problemas extradeportivos, que han mermado aún más el ánimo del club. Una grave crisis de tesorería ha provocado el aplazamiento de varios compromisos financieros, entre ellos la comisión adeudada al directivo Vinícius Prates por la adquisición del centrocampista Jair al Atlético-MG en enero.
Como parte de la negociación, se acordó que la comisión del gestor se pagaría a plazos, con Vasco realizando pagos mensuales hasta el final del contrato de Jair en diciembre de 2025. Sin embargo, hasta ahora no se ha pagado ningún plazo, y el club aduce dificultades de tesorería como motivo del retraso.
En respuesta, el abogado de Vinícius Prates, Carlos Licks Flores, anunció sus planes de iniciar un procedimiento ante la Cámara Nacional de Resolución de Disputas (CNRD), órgano regulador dependiente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF). Esta medida pretende recuperar el pago pendiente. Si la disputa continúa en el ámbito deportivo, el Vasco podría enfrentarse a las repercusiones de una prohibición de fichajes, que prohibiría al club inscribir nuevos jugadores.
Carlos Licks Flores expresó su preocupación por la situación, destacando casos anteriores de impago de Vasco a su cliente, incluso después de la transferencia de Vinícius Prates al Fondo de Salvamento (FAS). Los problemas recurrentes del club para hacer frente a sus obligaciones financieras han suscitado dudas sobre su capacidad para rectificar la actual situación de endeudamiento.
Sin embargo, cabe señalar que el Vasco todavía está al día con los pagos relativos a la transferencia de Jair del Atlético-MG. El club adquirió el 85% de los derechos económicos del centrocampista por 2,9 millones de euros (aproximadamente 15 millones de reales), y el próximo plazo vence en agosto.
A medida que se desarrolla la disputa, el Vasco se encuentra en una posición precaria, luchando por resolver las discrepancias financieras y, al mismo tiempo, luchando en el terreno de juego por recuperar su ventaja competitiva. La posible prohibición de fichar es una amenaza importante, que aumenta aún más la incertidumbre sobre el futuro del club en el Campeonato Brasileiro.